A nivel étnico mantiene las características propuestas por Constancio Franco. Se trata de un ejercicio de blanqueamiento de la escultura, para proponer al héroe como un semejante de los próceres criollos, como Santander, Nariño y el mismo Bolívar. Esculpiéndolo lo más parecido posible en el uniforme, la postura y en los rasgos físicos.
Para resaltar las cualidades navales de Padilla quien fue llamado por Bolívar «el Nelson Colombiano», en referencia al famoso comandante Nelson, el inglés que derrotó a Napoleón y a los españoles en Trafalgar.
«La canonización del Héroe» busca suspender las diferencias con Bolívar, el hecho de que este mismo lo envió al pelotón de fusilamiento y reconcilar la memoria nacional con la figura del héroe afrodescendiente.
Conecta las hazañas marítimas de Padilla con la Orden Naval Almirante Padilla, que en 1974 cambió su denominación a Escuela Naval de Cadetes “Almirante Padilla”.
Convoca aquel pasado heroico en el cual Padilla concluye de manera admirable la campaña independentista. Tan importante fue la batalla, que de ella se conserva uno de los pocos cuadros de batalla navales, que conmemoran las empresas libertadoras.